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La Paz - Bolivia, Domingo, 20 de septiembre de 2009
En las vísperas de la primavera comencé a sentir extrañas calenturas en mi cabeza, tronco, tronquito y extremidades del cuerpo humano, y es que el título de un libro producido por escritores cubanos y que lleva el título de Evo somos
Todos fue el causante de un ataque surtido en mi sesera.
La miré a mi esposa y sin previo aviso ni anestesia le di un beso en la oreja, luego del cual ella se separó de mi con expresión de espanto y me dijo: “Tienes la mirada extraviada como la tenía Ojinson Crusoe, llamaré inmediatamente a tu psiquiatra de cabecera”.
Cuando llegó el afamado galeno Dr. Marcelo de la Quintana (quien nada tiene que ver con el no menos famoso político) confirmó el diagnóstico de mi esposa y me manifestó con firmeza: “Estás más loco que una chiva desde que te han asegurado que ‘Evo somos todos’”, pidiéndome a continuación que le mostrara las últimas cartillas que yo había escrito. Humilde le enseñé unos papeles que contenían mi proyecto de ley que enviaré al Congreso para normar de manera definitiva las próximas elecciones de diciembre y que dice así:
Considerando: Que las próximas elecciones de diciembre no sólo serán reñidas sino también insultadas, arañadas, golpeadas y hasta pistoleteadas porque el presidente Evo y su acompañante Alvarín se juegan el todo por el todo.
Considerando: Que me ha llegado al corazón y también al huevo saber que “Evo somos todos”, siendo necesario que todos contribuyamos a la reelección del mencionado candidato considerado en “la República de España” como el Atahuallpa Junior.
Decrétase con aprobación legislativa: Todos los ciudadanos bolivianos que emigraron a Argentina, Brasil, Estados Unidos y España podrán votar en las oficinas consulares ya señaladas antes y la Corte Nacional Electoral fijará la cantidad necesaria de votos que precisa para triunfar el candidato Evo, actual presidente del Estado Plurinacional, Multicolor y Folklórico (ex República de Bolivia).
Artículo 2.° – Para facilitar las tareas escrutadoras de votos, sólo serán válidos los votos en favor del Candidato Oficial, desechándose los votos del extranjero en favor de postulantes desconocidos, neoliberales, reaccionarios, separatistas, terroristas e indigenistas extraviados.
Artículo 3.° – Así como en el fútbol se ingresa en los campos deportivos pagando una sola entrada que vale para dos, se autoriza a la Corte otorgar un valor doble al voto de los ciudadanos masistas que sea emitido en poblaciones rurales, para evitar sorpresas desagradables en lo momentos del escrutinio y recuento de votos. O sea que un voto por el MAS vale más, sobre todo en las áreas rurales.
Al conocer este mal engendro de un proyecto de ley que yo pretendía hacer llegar al H. Congreso Nacional, mi psiquiatra de cabecera movió la cabeza con preocupación y le dijo a mi esposa: “Tu marido está más loco que una chiva, aunque no le falta razón para algunas cosas”.
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