Elecciones en la cárcel

© by Paulovich

Sabado, 10/Oct./2009

Les he contado muchas veces que tengo un buen recuerdo de la cárcel de San Pedro luego de una breve permanencia en esa ciudadela amurallada, acusado calumniosamente de bigamia. Es por ello que las noticias que se producen allí siempre las leo con interés y afecto, pues en esa prisión se vive, se ama, se sufre y también se goza al igual que en cualquier sitio del país.

Sin embargo, no pude estar presente el martes pasado en el mencionado penal para escribir una crónica acerca de las elecciones que se cumplieron en la sección La Posta, cuando los presos debían designar a su representante, una especie de diputado con traje a rayas horizontales y un número en su valiente pecho, rogando a un amigo allí encarcelado, con el alias de el “Chinchulines”, que me proporcionara la información necesaria para esta crónica que me ha sido encargada por el semanario policial Alcatraz Times.

Una pequeña muestra de lo que podrían ser las elecciones generales que se desarrollarán en Bolivia el próximo mes de diciembre se llevó a cabo en la sección La Posta de la cárcel de San Pedro en La Paz.

Realizadas el día martes de la presente semana, fue elegido representante de los presos el presidiario Santos Ramírez, quien fue uno de los fundadores del Movimiento Al Socialismo (MAS), fue Presidente del Honorable Senado Nacional durante el Gobierno del actual presidente y candidato a la reelección, Evo Morales, y ex presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, la entidad estatal que maneja los recursos petroleros y gasíferos del país.

Como dato anecdótico debemos señalar que esta fiesta democrática y folklórica tuvo que cumplirse dos días antes pero fue postergada hasta la fecha indicada porque las papeletas de votación no fueron entregadas a tiempo por los impresores a quienes había contratado el candidato triunfador.

El experto político Santos Ramírez reiteró ante cerca de cien votantes que eran ciudadanos libres a pesar de estar presos y que estaba seguro de obtener sus votos porque él (Santos Ramírez) pertenecía al Movimiento Al Socialismo (MAS), partido que triunfaría en las elecciones generales de diciembre, invitando a sus votantes un suculento desayuno que conmovió al pueblo votante encarcelado.

Anteriormente y en medio de proclamas revolucionarias y diálogos privados, el candidato masista invitó a los electores una típica salteñada, a la que siguió una lechonada capaz de convencer a sus más recalcitrantes opositores. Santos Ramírez, el triunfador, ganó por 42 votos contra 36, resultado que si se repite proporcionalmente en los comicios de diciembre, no es para festejar de tal manera, pero Santos Ramírez del MAS triunfó.

Para confirmar su identidad masista, Santos Ramírez juró a su nuevo cargo con el puño izquierdo en alto.

Así dice la información que me proporcionó el “Chinchulines”, versión cochabambina de Jack el Destripador, desde la cárcel de San Pedro.

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