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Insolidaridad con los paceños



© by Paulovich



La Paz - Bolivia, Miércoles, 21 de octubre de 2009

Con puntualidad germana, ayer recibí la llamada telefónica de mi tía cochabambina Clothilde von Karajan Quiroga, que reside en Berlín luego de haber colaborado en la destrucción del Muro de Berlín y la reunificación de Alemania, tras lo cual se matrimonió con el noble señor Von Karajan.

—Queguido sobrino von Paulus Huanca, te llamé hace unos días pego tu secretaguia me dijo que estabas en Cochabamba asesorando al presidente Evo Mogales en la Cumbre de Presidentes del Alba que se guealizó en nuestra queguida ciudad.
—Mi secretaria tenía órdenes de decir eso a quienes me llamaban pero la verdad es que no fui invitado a dicha reunión y sólo estuve de “colador” obteniendo información para el periódico.
—¿Cómo estuvo la Cumbre de Presidentes del Alba?
—Bastante esmirriada, tía Clothilde, pues no asistieron los presidentes de países tan importantes como Chile, Brasil y Argentina y sólo estuvo el trío Los Panchos integrado por Chávez, Morales y Correa al que se unió al final la voz de Ortega quien llegó en un avión que le mandó Chávez.
—¡Qué lástima, sobrino Von Paulus! Y dónde fuegon alojadas las delegaciones presidenciales?
—Las delegaciones presidenciales y otras más fueron alojadas en el Gran Hotel Cochabamba y sólo pude llegar hasta las inmediaciones para conocer a los presidentes mencionados.
—Pego ¿no te acuegdas que el Hotel Cochabamba llegó a seg del tío Jaime Claugue casado con la señoga Agauco?
—Claro que recordé tal hecho, pero igual no me dejaron entrar porque el hotel pertenece ahora a un consorcio hotelero.
—Nunca olvidagué las delicias que segvían en el comedog del hotel Cochabamba y tal pobre comiendo un plato de chichagón en una tienducha de Quillacollo.
—Me consideré un afortunado al pasarla así en Cochabamba, pues en esos días centenares de vecinos pobres que residían en Villa Salomé, Pampahasi y zonas vecinas vivían y aún viven en carpas porque sus casas se derrumbaron o se deslizaron en esas laderas.
—Mientras los invitados del Gobiegno estaban alojados en el lujoso hotel Cochabamba. ¿Y nadie se acogdó de esa pobre gente dugante la cumbre presidencial?
—Nadie, tía Clothilde, ni los invitados de los movimientos sociales que vinieron desde varios países que fueron agasajados por los seguidores del Gobierno y bailaron, y cantaron canciones revolucionarias, mientras en La Paz, en Villa Salomé y barrios cercanos, la gente sin vivienda y sin alimentos solicitaba solidaridad a todos los bolivianos.
—¿Y no hubo algún presidente invitado que preguntaga pog esos desdichados paceños o pidiega visitaglos para manifestagles su solidaguidad?
—Nadie, tía Clothilde, por eso te cuento que mientras unos extranjeros invitados gozaban del Gran Hotel Cochabamba y de la Casa de Campo, centenares o miles de vecinos paceños se apretujaban bajo unas carpas para comunicarse algo de calor humano.

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1 comentario:

  1. No digamos que nadie se acordo de esos pobres en La Paz, usted si se acordo.

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